Habría que darles unas elementales catequesis a esos ignorantes y explicarles básicamente que en la Santa Misa conmemoramos y hacemos presente la muerte de Alguien que murió para salvar a todos y cada uno de los hombres y mujeres que hayan existido alguna vez en este mundo -incluidos ellos, los miembros de Podemos-; y que mientras lo crucificaban oraba por sus verdugos.
Hacemos presente el más impresionante y decisivo acto de amor jamás ocurrido en el pasado, presente y futuro de la humanidad. Y lo más tremendo de todo es que lo hizo sin que lo mereciéramos, ni los de Podemos, ni absolutamente nadie.
Por eso -habría que seguir explicándoles, a ver si aprenden-, la Santa Misa es en rigor una "eucaristía" una "acción de gracias", que los que no somos ingratos ofrecemos a Aquél que tanto bien nos ha hecho, nos sigue haciendo y nos hará en el futuro, en este mundo y en el otro. Ser amados y agradecer ese amor -que se abre a todos, incluidos ellos, los de Podemos- , en fin, es incompatible con el hecho de odiar.
¡Ojalá aprendan! Y al menos, aunque no tengan fe -que es un don del cielo-, al menos que no desbarren y digan disparates
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